Perdón, perdón, yo sé que se han tomado la molestia de revisar este lugar y me he tardado algo en actualizar. Pero creo que sobra decirles que ha sido por falta de tiempo, jamás de ganas. Y mientras esperamos a ver con qué nos sorprende Heaven And Hell y su próximo disco, les comparto esta experiencia de hace como cuatro años, con una de las personas más amables que he conocido en la vida: Ronnie James Dio. Este encuentro se dio gracias a un pase Meet & Greet que me gané en la radio, un día antes del concierto. Los otros dos ganadores (porque regalaron solo tres), fueron mi hermano Paul y mi amigo Ponchito (sí, el especialista en cine de animalitos). Para tal efecto yo fungí como cachirul y contesté las trivias fingiendo otras voces. Sin embargo, mientras esperábamos para entrar al camerino, un par de personas se nos acercó para preguntar qué hacíamos esperando ahí. Y al enterarse, hicieron una llamada telefónica y en cuestión de segundos tenían también un par de pases. Esta situación puso a prueba el poder del Tour Manager de Dio, pues aunque se puso bien punk discutiendo que solo éramos tres invitados, gente de los promotores terminó por convencerlo de que si ellos también tenían pase, también entrarían. Y vale la pena comentarles que esta charla en su momento la entregué para La Mosca en la Pared. Y aunque Hugo García Michel me dijo que sí le interesaba, jamás la publicó.
Comenzamos:
Muchos no lo ven (y muchos se niegan a hacerlo), pero la importancia que Ronnie James Dio tiene a la música contemporánea, especialmente la pesada, es inminente. Y sin duda se equipara con la de sus contemporáneos, entre los que se encuentran Robert Plant, Freddie Mercury, Ian Gillan y demás auténticas vacas sagradas, con las que en la década de los setenta orilló a muchos a tomar un micrófono o una guitarra.
Y si alguien pide pruebas de su calidad como compositor, pues ahí están los tres mejores discos de Rainbow, tres de los más importantes discos de Black Sabbath y un puñado de clásicos del heavy ochentero con su banda Dio. Y de su voz, parece que nadie se atreve a argumentar en su contra.
Afortunadamente Dio no ha sido ajeno a nuestro país y en 1992 se presentó al lado de Black Sabbath, en un histórico concierto en el Palacio de los Deportes. En el año 2000 regresó como invitado de Deep Purple al Auditorio Nacional y el pasado 21 de agosto de 2004 se presentó en el Salón 21, por primera ves con su banda Dio ( y a estas alturas ya regresó con Dio al Circo Volador en 2006 y con Heaven And Hell rompió madres apenas el año pasado en el Auditorio Nacional). Al término de este, se nos brindó la oportunidad de visitarlo en su camerino y esto es lo que sucedió.
Con las medidas de seguridad de costumbre, su manager de gira nos pasó al camerino pidiendo que tomáramos asiento y esperáramos, pues Dio no tardaría en salir. Y así fue. Con una amabilidad fuera de este planeta, el pequeño con la voz de trueno se acercó a saludarnos, agradeciendo la espera y que estuviéramos ahí. Inmediatamente, y tras agradecerle por visitarnos de nuevo, le entregué un sobre con fotos tomadas en nuestro país, durante su concierto con Black Sabbath y en la conferencia de prensa con Deep Purple. Al ver las de Sabbath se acercó hacia los focos que rodean el espejo del vestidor y observándolas con detenimiento recordó el momento: “ Me acuerdo muy bien de este concierto, y en especial del lugar en el que tocamos, ya que tiene unas interesantes estructuras metálicas en el techo. Y nunca olvidaré que había un insecto revoloteando a mi alrededor, creo que era una libélula, y cuando abrí la boca para cantar se me metió hasta la garganta. Entonces comencé a toser hasta que logré sacármelo. Y el concierto fue muy bueno, desafortunadamente fue uno de los últimos que realicé con la banda”
Así fue debido a que una semana después serían los conciertos de despedida de Ozzy Osbourne, para los que invitó a Sabbath a tocar como invitados especiales cierto?
“Así es, y bueno yo entiendo que para Tony(Iommi), era una buena oportunidad de hacer dinero, y no lo culpo. Pero yo también soy muy especial y me parecía que no podríamos llegar más lejos. Es una lástima porque en verdad tengo grandes recuerdos de mi etapa con Black Sabbath”.
Al ver la foto con Purple, notablemente conmovido, comenta: “Cuantos recuerdos, esto fue hace cinco años”
Cuatro (lo corrijo), y le pregunto su opinión acerca de la declaraciones que recientemente hizo Ian Gillan, acerca de lo mucho que estima a Tony (Iommi), Geezer (Butler) y a Dio de Black Sabbath.
“No sabía, pero me lo imagino ya que en verdad me llevo muy bien con Ian. Sabes que puedo decir que lo conocí apenas en esa gira que realicé con Purple en el año 2000? Mira, cuando yo estaba con Elf fuimos los abridores para Deep Purple en 1973, y entonces entre Ian y Ritchie (Blackmore), las cosas ya estaban muy mal. No se podían ni ver y entonces Ian llegaba directo para subir al escenario y cuando terminaba el concierto bajaba y se iba. Sin embargo con los demás si fue todo muy diferente. De Roger (Glover), qué te puedo decir? Probablemente Roger sea mi mejor amigo y con el he pasado muchos buenos momentos. Y entonces, por eso es que apenas conozco a Ian, y durante esa gira del 2000 nos la pasamos muy bien”.
Todavía te detienes a escuchar la música que hacen Iommi y Blackmore? “La de Tony sí porque es uno de los mejores músicos de rock y además es un gran tipo. A pesar de todo lo que pasó no tengo ningún problema con él. Y de Ritchie definitivamente no. También él es uno de los más grandes músicos pero simplemente escuchar de él no me es nada placentero. Además la onda medieval en la que anda no me convence, yo sé que en cualquier momento volverá a tomar la guitarra eléctrica y se enchufará de nuevo”
Oye, pero eso le gustaba desde entonces no?
"Sí pero no a tal grado. Él adoraba el impacto de los amplificadores y ahora yo se que no tardará en volver al rock and roll”
A continuación le menciono las recientes declaraciones hechas por Tony Iommi, en las que asegura que es una pena que la etapa de Sabbath con Dio, no reciba el reconocimiento que merece (luego de varios años en campaña pro- Ozzy, en los que evadía el tema), y comenta:
“Sí, ya las leí. Pero sabes lo que decía entonces? Según él yo debería estar agradecido, pues estaba recibiendo más crédito del que merecía. Y ahora dice lo contrario. Pero bueno, así son las cosas. Lo que pasa es que Tony es todo un caso. Mira este es Tony”, en ese momento toma de la mesa una charola y actuando como mesero, pasa bruscamente entre quienes nos encontramos ahí: “Con permiso, con permiso!. Así es Tony, se mueve de acuerdo a las circunstancias, sus necesidades y sin preocuparse por los demás. Pero a fin de cuentas ahí están las canciones, y las versiones de Ozzy para quien las quiera y las mías para quien las quiera”
En ese momento domino al fan que llevo adentro y de la manera más objetiva, le explico que sin embargo ahí está Live Evil, el disco que grabó en vivo con Sabbath y que incluye sus interpretaciones a los clásicos de la época de Ozzy, y que para muchos seguidores significan una inigualable revitalización de esas canciones, a lo que intimidado argumenta:
“Si tú lo crees. Bueno, solo te diré algo, en aquella época Tony lo aceptó”
Ronnie, si tuvieras que escoger un disco de Sabbath y uno de Rainbow para escuchar completo, cuáles serían?
“No escogería uno y uno, definitivamente sobre Black Sabbath y Rainbow sería Heaven And Hell. Ese disco es muy especial para mí, ya que en ese momento yo quería comenzar a hacer música más obscura y profunda. Y con Sabbath compuse canciones con las que me sentía mas a gusto. Sin duda esa época es algo de lo mejor en mi vida”
Cabe mencionar que esta plática no fue una entrevista, sino una convivencia y como tal mientras autografiaba unos programas de Black Sabbath, hacía memoria tratando de recordar los lugares en los que las fotos fueron tomadas. Y en ese ambiente le agradecí haber tocado durante el concierto “The Sign Of The Southern Cross”, la cual personalmente considero una de sus mejores composiciones, y con un gesto de asombro contesta:
“Que bueno que así te parezca, ya que a mi parecer esa canción ha sido muy incomprendida y de hecho creía que solo a mí me gustaba. Ese disco (Mob Rules), en sí es bastante oscuro y “The Sign Of. ...” siempre ha sido mi canción favorita del disco”
Y también desenterraste para el concierto “The Gates Of Babylon” de Rainbow...
“Si, también esa es una canción muy buena. Y creo que no la tocaba desde que estaba en Rainbow”
Y cuando Dio llamó a Rudy Sarzo, Simon Wright y Craig Goldie (bajista, baterista y guitarrista respectivamente de su banda), a que salieran para la foto del recuerdo (llamado al que solo Goldie bastante contento asistió), sabíamos que el tiempo había terminado y nos despedimos de la leyenda Ronnie James Dio, agradeciendo de nuevo la amabilidad con que nos recibió como en su casa.
Nota: Perdón pero me jacto de presumir, que las fotos que ilustran este texto fueron tomadas con mis manitas.